Obtenida por la reacción química entre dos componentes líquidos: isocianato y polihidroxilo, en presencia de catalizadores. La estructura celular está formada por el desprendimiento de CO2 en una reacción química secundaria o por la ebullición de un líquido (agente de expansión) bajo el efecto del calor de reacción.
En las últimas décadas, el poliuretano atrajo la atención en el campo del aislamiento térmico a bajas temperaturas.
Sus características principales son:
conductividad térmica baja debido a la sustitución del aire en las células por un gas de peso molecular elevado; posibilidad de ampliarse en el lugar de trabajo;
soportan temperaturas superficiales elevadas; y resisten al moho y al ataque de diversos parásitos.
Las espumas rígidas, empleadas para aislamiento térmico, presentan una proporción relativamente alta de células cerradas, lo que mejora aún más la característica aislante de este material. Existen técnicas para la fabricación de espumas cuyas células son todas cerradas, prácticamente estancas al agua, vapores y gases.