La humedad en un sistema de refrigeración (unidad sellada), representa el principal origen de defectos, causando desde congelaciones a la corrosión, dañando y obstruyendo válvulas, filtros y tuberías. La humedad en forma de vapor (humedad relativa) se encuentra en todas partes, tanto en los sólidos como en los líquidos y gaseosos.
Para poder evaluar qué tipo de problemáticas es la humedad, conviene examinar más cerca el efecto causado dentro del sistema. La humedad, generalmente localizada en el lado de baja presión, acarreará como consecuencia la obstrucción del tubo capilar o de la válvula de expansión. Si se calienta el punto de congelación, los cristales de hielo pasarán de nuevo al estado de vapor y el fluido refrigerante volverá a circular normalmente, pero después de algún tiempo volverá a bloquear el paso del fluido refrigerante.
La humedad puede ser desplazada a través del sistema, por el arrastre del fluido refrigerante.
Este fluido refrigerante se combina con la humedad descomponiéndose en la formación de ácidos, acelerado por la temperatura elevada, induciendo aún a la oxidación. El aceite incongelable usado en compresores sellados, tiene gran afinidad con el agua. Esta, transformada en ácido, se combina con el aceite, recorriendo las partes sujetas a lubricación, erosionándolas.
